Una pareja de José C. Paz murió en un violento choque ocurrido el viernes por la noche en la intersección de la Ruta 197 y Mendoza. Viajaban junto a sus tres hijos cuando una camioneta Volkswagen Amarok los embistió con fuerza. Las víctimas fueron identificadas como Eliana Ramírez, de 31 años, y Renzo Benítez, de 37. Su hija mayor, de 13, continúa internada en grave estado.
El siniestro tuvo lugar pasadas las 23, cuando el Renault 12 en el que se desplazaba la familia cruzó la ruta 197 y fue impactado de lleno por la Amarok conducida por Michael Carballo, de 23 años, quien quedó detenido. El golpe se produjo del lado del acompañante y provocó la muerte instantánea del matrimonio. Los tres niños —de 8, 11 y 13 años— fueron rescatados por los Bomberos Voluntarios de José C. Paz con múltiples lesiones.
Fuentes de la investigación indicaron que la prueba de alcoholemia a Carballo dio negativo, aunque se esperan los análisis de sangre y orina para confirmar el resultado. La causa quedó a cargo de la fiscal Ana De Leo, de la UFI N° 4 del Departamento Judicial de San Martín, que ordenó peritajes para determinar la velocidad de impacto y la secuencia exacta del hecho.
Según testimonios recogidos por familiares, habría testigos que sostienen que Renzo cruzó con el semáforo en verde y que el conductor de la Amarok venía atravesando varios semáforos en rojo. “Mi hermano cruzó con el semáforo a su favor. Hay testigos que lo vieron. El otro venía a toda velocidad”, relató Cristian Benítez, hermano de la víctima, quien además destacó que fue uno de los hijos de la pareja quien, pese a sus heridas, logró avisar a la policía para que alertara a los familiares.
Los hijos del matrimonio permanecen internados. La mayor fue trasladada al Hospital Posadas, donde fue operada de urgencia por una hemorragia interna y una fisura de pelvis. Los dos varones más chicos continúan en el Hospital Mercante con cuadros más alentadores: el de 11 años ya fue notificado de la muerte de sus padres, mientras que el menor aún no lo sabe.
El dolor se multiplicó entre familiares y amigos, que describen a Renzo como un trabajador incansable dedicado al rubro gráfico y a Eliana como “una mujer alegre, con una sonrisa siempre a flor de piel”. Ambos estaban muy involucrados en su comunidad evangélica y eran muy queridos en el barrio.
Mientras avanza la investigación judicial, las familias de las víctimas iniciaron una colecta para poder costear los gastos del sepelio.
