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Vicente López: tras el cierre de dos clínicas, 300 familias temen por sus trabajos

Luego de la clausura del Centro Salud Norte, en Villa Adelina, la Municipalidad de Vicente López inhabilitó al Sanatorio Mariano Pelliza de Munro por “falsedades” e irregularidades.

Primero fue el Centro de Salud Norte, clausurado y con sus responsables detenidos. Ahora, le tocó el turno al Sanatorio Mariano Pelliza también es propiedad de Benjamín Teitelbaum. La clausura del centro médico tuvo lugar este sábado 6 de junio, en horas de la tarde, a través del personal de la Dirección de Seguridad e Higiene, Bromatología y de Política y Control Ambiental, dependientes de la Secretaría de Fiscalización y Control, junto con personal de la Secretaría de Salud de la Municipalidad de Vicente López.

Se realizó una inspección donde se pudo verificar que se incumplían normas de seguridad e higiene. Había deficiencia en las instalaciones eléctricas, en la recolección de residuos patogénicos y residuos líquidos, al igual que en el Centro de Salud Norte, faltaba control de plagas y se detectaron “falsedades” en la declaración jurada de las instalaciones del sistema de protección contra incendios, sin contar con un protocolo ante coronavirus.

Ante esta situación, el personal de enfermería, cocina, limpieza, camilleros y administrativos de la clínica, agrupados en la Asociación de Trabajadores de la Sanidad Zona Norte, ATSA, denunció que teme perder sus trabajos. “Acá en el Pelliza somos 300 familias, todo personal bajo convenio. Estamos con bronca porque no nos merecíamos esto. Siempre se respetaron los protocolos para Covid-19, desde tomarnos la temperatura al ingresar, hasta el uso de alcohol, barbijos y máscaras. Y no tenemos ningún caso de trabajadores contagiados”, dijo Aldana Castañeda, vecina de Munro y enfermera en la clínica desde 2001.

En el Sanatorio Mariano Pelliza aún permanecen internados 44 pacientes, de PAMI y de otras obras sociales. Su derivación se terminará de concretar durante esta semana, según informaron fuentes comunales. Después de eso, la institución no podrá recibir más pacientes. Además, el PAMI también dejará de derivar pacientes. Según dijeron, permanecen cinco casos sospechosos que aguardan el resultado del test. “Confirmados tenido habremos entre 14-15 pacientes en toda la cuarentena, por eso creemos que esto viene como consecuencia de la inspección al otro sanatorio. Los protocolos se activaron desde el día uno, hubo hasta suspensión de visitas de familiares”, destacó Aldana.

Néstor Genta, secretario general de ATSA zona norte pidió que el Ministerio de Trabajo de la Provincia de Buenos Aires garantice las fuentes de trabajo ante esta situación. “Entre las dos clínicas sumarían ya cerca de 500 familias que podrían quedar en la calle sin cobrar su sueldo”. En ese sentido, destacó que más del 75% de los trabajadores del centro médico de Pelliza son mujeres y en su gran mayoría, jefas de familia.

Fuente: (www.www.zonanortediario.com.ar / Clarín)

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