Respondernos ¿por quí ahora esto? nos llevará a la raíz del problema que enfrenta hoy toda la sociedad: tarifas subsidiadas durante mucho tiempo y para todos por igual.
Y ahora se pretende que soportemos el ajuste -así de prepo y de un golpe- con aumentos que en muchos casos trepan al 400%, que resultan desproporcionados a la realidad que enfrentamos en el día a día.
Para resolver definitivamente este problema de hoy ("tarifas retrasadas"), ¿no resultaría ideal que los que pueden siempre paguen lo que vale, y se subsidie a los que verdaderamente lo necesitan?.
Mientras el ideal llega, ahora, en lo inmediato, para emparchar este mamarracho que benefició a los que más consumen y mejor pueden, y pese a que la inflación defendida por el gobierno a travís del INDEC no llega siquiera a los dos dígitos, ¿no sería más coherente que los usuarios que deberían afrontar la suba de servicios tan vitales como la electricidad y el gas, lo hicieran de acuerdo a parámetros más lógicos?: Por ejemplo, los grandes consumidores –industrias y comercios- deberían tener incrementos que no superaran el índice de inflación mayorista.
Para los usuarios residenciales el aumento no tendría que ser superior al porcentaje de incremento salarial que recibieron durante el año 2008. Lo mismo debería suceder con los jubilados, cuyos magros ingresos no le permiten afrontar los aumentos desmedidos que se pretenden instaurar.
Difícilmente se logre poner en marcha la reactivación que nuestro país necesita (y que ha sido tan promocionada), con medidas confiscatorias como las que este gobierno pretende imponer.
¿No le parece, ciudadano?
Fuente: www.zonanortediario.com.ar