El ex Jefe de Gabinete de la Nacion, Alberto Fernández, defendió esta mañana su acercamiento con el platense Pablo Bruera, negó que el rejunte tenga motivaciones en contra de alguien en particular y dijo, por el contrario, que apuesta “por la positiva, a animarnos a generar una corriente generacional que plantee algunas cosas donde lo central sea el recambio”.
“Esto no tiene el propósito de obstaculizar ni de complicarle la vida al Gobierno o a nadie; la verdad es que el espacio no está hecho para que alguien se moleste”, aseguró Fernández esta mañana al ser consultado acerca de su comentada reunion, ayer, en La Plata con el díscolo Pablo Bruera.
En declaraciones a una emisora de radio porteña, Fernández dijo “compartir” con el alcalde platense “la preocupación sobre la necesidad de promover un debate, de abrir otros canales de acceso de otras generaciones al escenario central de la política argentina”.
"En el Gobierno no sí si se molestan. La verdad es que no está hecho con el propósito de que alguien se moleste. Yo soy de los que piensan que estamos en un tiempo de la Argentina y de la historia democrática reciente donde deberíamos animarnos a tomar las cosas buenas que cada uno ha hecho, y a rechazar y no repetir y no hacer las cosas malas en que han incurrido otros con esa lógica tambiín veo al Gobierno y a todo este proceso que se inició en 2003", remarcó Alberto Fernández.
Y en ese marco, advirtió que “si no somos capaces de construir una alternativa para el futuro, nos va a pasar lo que le pasó a la concertación chilena, donde los errores de buscar en el pasado una alternativa de futuro hizo que muchos vieran como novedoso algo que tal vez sea mucho menos novedoso de lo que parece”.
Fuente: www.zonanortediario.com.ar