El Concejo Deliberante de San Isidro aprobó el Presupuesto 2026 y las ordenanzas Fiscal e Impositiva, en una extensa sesión atravesada por cruces, pases de factura y un reordenamiento interno tras las elecciones del 7 de septiembre. El proyecto enviado por el intendente Ramón Lanús fija un gasto cercano a los $340.000 millones y consolida la nueva mayoría oficialista en el recinto.
El debate fue el primero bajo la presidencia de Jorge “Pana” Álvarez, que asumió con un perfil firme y limitó las intervenciones a diez minutos. Esa decisión derivó en fuertes chispazos con concejales opositores del possismo, entre ellos Walter Pérez, que respondió con ironía a las restricciones en el uso de la palabra.
Desde el oficialismo defendieron el presupuesto como una herramienta estratégica para un “plan de gobierno” orientado hacia la autonomía financiera y la inversión en infraestructura. El vicepresidente primero del cuerpo, Juan Bautista Ocampo, afirmó que “hace mucho tiempo que no se ve un proyecto que, más que un listado de gastos, sea un verdadero plan de gobierno pensado a futuro”. Según el proyecto, el 70% de los ingresos municipales provendrán de recursos propios, mientras que el 40% del gasto será destinado a obra pública, proporción destacada por el Ejecutivo como inédita.
Desde la oposición, la concejala Manuela Schuppisser cuestionó el rumbo social de las partidas y advirtió que el municipio “administra la crisis” sin fortalecer áreas sensibles como salud y desarrollo social. Señaló un “ajuste real” en programas sociales, donde las partidas crecen nominalmente pero pierden frente a la inflación, y advirtió que el presupuesto de salud apenas alcanza para sostener un sistema “ya saturado”.
La votación reflejó con claridad el nuevo mapa político local. A favor votaron los concejales alineados con el intendente Ramón Lanús, junto a representantes de La Libertad Avanza, ConVocación, el Partido Demócrata y parte del possismo. En contra se expresaron ediles del Frente Renovador, Fuerza Patria y sectores peronistas. Se abstuvieron dos concejales del possismo. En total, el presupuesto obtuvo 16 votos afirmativos, 6 negativos y 2 abstenciones.
En la misma jornada se aprobaron las ordenanzas Fiscal e Impositiva. Se establece un incremento inicial del 8% en las tasas municipales desde enero, mientras que a partir de marzo el Ejecutivo quedará facultado para aplicar actualizaciones bimestrales en función del IPC del GBA publicado por el INDEC. El oficialismo destacó que las tasas se mantendrán por debajo de la inflación y se ratificaron medidas de alivio fiscal, entre ellas el descuento del 10% para quienes paguen el ABL de forma anual sin registrar deudas, y un esquema de exenciones para jubilados, pensionados y personas con discapacidad.
Con estas herramientas aprobadas, la gestión Lanús inicia 2026 con un respaldo legislativo más sólido para avanzar en su agenda de obra pública, ordenamiento fiscal y fortalecimiento de ingresos propios, en un Concejo que exhibe tensiones crecientes y una correlación de fuerzas más definida tras las elecciones.

