No hay dudas de que la educación es clave en la vida de una persona y en el desarrollo de una comunidad. Mucho más importante es entre los 45 días y 2 años, cuando los más chiquitos comienzan a interactuar dentro y fuera del núcleo familiar. Cuando esa etapa fundamental se amplía a las posibilidades que brinda una institución educativa, los niños mejoran significativamente su socialización y habilidades cognitivas, permitiendo a sus padres continuar con su dinámica laboral sabiendo que sus hijos se encuentran en un entorno cuidado y seguro.
El pasado miércoles se presentaron en el recinto del Honorable Concejo Deliberante de San Isidro 3 proyectos referidos a primera infancia. Uno de ellos, es un Proyecto de Ordenanza para la creación de un Jardín Maternal Municipal. El objetivo, según comentaron los concejales, es orientar la inversión a las zonas del distrito donde las familias no cuentan con una oferta educativa cercana a sus hogares.
Consultado sobre sus proyectos, el concejal Marcos Alcides Díaz señaló que “San Isidro tiene un vacío en lo que se refiere a Jardines Maternales. Hay pocos, están mal distribuidos y son todos de gestión privada. Esta dinámica los hace inaccesibles para gran parte de la población, sumado a los altos precios en los que rondan las matrículas y cuotas de los establecimientos privados. En San Isidro hay 15 Jardines de Infantes Provinciales, de los cuales sólo 6 cuentan con sala de 2 años, y 12 Municipales, que son a partir de los 3 años. Por este motivo, desde el Municipio se tiene que trabajar para dar una educación de calidad desde los primeros meses de vida”.
Para muchos padres y madres que residen en San Isidro, marzo fue un mes difícil. A los niveles inflacionarios de los últimos meses, los cuales impactaron en las matrículas y cuotas de los jardines y colegios, se le suma la poca oferta educativa para los más chicos. Atendiendo esta problemática, el Observatorio de Investigación Demográfica de la Provincia de Buenos Aires (OIDBA), realizó un sondeo a comienzos de marzo para evaluar las principales dificultades que registran madres y padres en la búsqueda de Jardines Maternales para sus hijos. Entre los hallazgos de la investigación, el estudio reveló que buena parte de los padres y madres que participaron del relevamiento, tienen que enviar a sus hijos e hijas a Jardines de otros distritos, debido a la imposibilidad de conseguir oferta educativa en San Isidro. Esto, además de repercutir en el tiempo de traslado e impactar en el gasto en transporte mensual, posiciona a San Isidro por detrás de otros municipios en un área tan relevante como la educación.
Sobre el proyecto en concreto, el concejal comentó que “lo que nosotros queremos es ser eficientes en el uso de los recursos, identificar las zonas donde faltan jardines, y mejorar aquellas que así lo necesiten. Escuchando a padres y madres y trabajando con mi equipo, propusimos la creación de un Jardín Maternal en Béccar, la extensión de salas de 2 años en los Jardines de Infantes Municipales y la creación de nuevos Centros de Integración y Cuidados Infantiles. Esto transformaría la vida a esos padres y madres que hoy tienen que ir hasta otro barrio o municipio para educar a sus hijos e hijas, o en el peor de los casos, se ven imposibilitados de llevar a sus hijos a un maternal. Es tiempo, es dinero y es calidad educativa”.