El intendente de Pilar Nicolás Ducotí recibió a Zona Norte Diario Online en su despacho para trazar un balance de los primeros tres meses de gestión; detalló los problemas encontrados como la deuda heredada de la gestión de Humberto Zuccaro de más de 300 millones de pesos y dejó en claro que "soy muy critico de la administración del patrimonio de Pilar" y que "si hubo comportamientos indebidos avanzaremos en las sanciones"; además enumeró sus objetivos para los próximos cuatro años.Nicolás Ducotí tiene 45 años y es uno de los nuevos intendentes bonaerenses. En octubre del año pasado desplazó a uno de los barones del Conurbano, el pilarense Humberto Zúccaro, con la boleta de Cambiemos.
En un mano a mano en su oficina en el Municipio de Pilar con Zona Norte Diario Online, abordó los principales objetivos de su gestión, los problemas más importantes del distrito y sus planes para resolverlos.
– ¿Cuál es el balance de estos primeros tres meses de gestión?
Hemos puesto un esfuerzo enorme en ordenar lo que estaba desprolijo y desordenado, eso a veces toma mucho más tiempo y energía del que hubiera querido dedicarle. Le pusimos mucha garra a ordenar los malgastos que había, mejorar procesos y procedimientos mal diseñados y tambiín en conformar un equipo, aprendiendo a trabajar unos con otros. Estos primeros días son la base fundamental para proyectar lo que viene, y en eso soy muy optimista cuando miro para adelante. La potencialidad de Pilar como Municipio la vamos a aprovechar muchísimo por el trabajo de movimiento de suelo que hicimos en estos tres meses, para sembrar lo que los pilarenses que votaron un cambio esperan.
– ¿Quí objetivos concretos tiene para cumplir en su gestión de acá a cuatro años?
Llegar al 50% de agua y cloacas. La mitad de la gente de Pilar tiene que tener agua potable y servicio de tratamiento de aguas servidas.
Quiero lograr que muchísima más gente tenga titularización de la tierra, llegar a las 1000 por año, ya que venimos de unas 100 por año.
Quisiera logar la mejora definitiva en el tema de las inundaciones. Hay una parte que depende de Provincia que es la de la Cuenca del Río Luján, y una parte grande que depende del Municipio que son los reservorios, zanjas y canales de entubamiento que funcionen hidráulicamente como corresponde. Quiero que cuando llueva en Pilar sea una lluvia y no un drama o una crisis, eso tiene que ser muy medible en los 12 barrios en los que típicamente tenemos anegamientos o problemas que afectan la vida de la gente.
Quiero duplicar la inversión en seguridad y que la gente se sienta doblemente más segura. Pilar viene muy atrasado en cantidad de patrulleros, cámaras, efectivos y capacitación. Así que vamos a poner fuerte foco en que la policía local estí presente en los barrios y en los horarios que los vecinos lo necesitan.
Despuís hay dos números muy dolorosos en Pilar que queremos modificar. Tenemos 3200 chicos afuera del sistema escolar, este año vamos a lograr bajar a 1000 ese número con apertura de jardines y la aplicación del doble turno en algunas escuelas que no lo tenían. Ese trabajo de inclusión desde la educación es fundamental. En estos cuatro años quisiera llevarlo al mínimo histórico.
Lo mismo en salud. Tenemos indicadores dramáticos en mortalidad infantil, falta de atención en barrios enteros. Hay que buscar desarrollar un sistema de salud rápido, ágil y adecuado y eso no estaba pasando en Pilar.
Nuestra idea es compartir indicadores concretos con los vecinos con el eje en obras, seguridad, salud y educación, para medir resultados año a año durante estos cuatro años.
– Uno de los temas más polímicos de la gestión de Humberto Zúccaro en Pilar es la gran cantidad de becarios, que son empleados extremadamente precarizados ¿Se está trabajando en mejorar la situación laboral de los municipales?
Tenemos que ir logrando una mayor incorporación a planta transitoria y permanente de las personas que estaban en una situación totalmente precaria en el Municipio. El concepto de la beca o el estimulo económico estaba diseñado para deportistas de alto rendimiento o para personas que querían completar una etapa de formación acadímica y necesitaban ese acompañamiento material. Se diseñó con un espíritu adecuado y se desvirtuó cuando terminó financiando la política. Casi la mitad de la planta es permanente y la otra transitoria o becarios.
Debemos ordenar eso y lo estamos haciendo con tres herramientas distintas: la primera es la ordenanza de empleo municipal que estableció criterios para la negociación sostenida con los gremios al respecto de las condiciones laborales de las personas. La segundo es que avanzamos en el proceso de paritarias y en iniciar el diálogo para el convenio colectivo. Hicimos la primera paritaria de la historia de Pilar para definir lo sueldos de este año. Y hora estamos en la etapa de ordenamiento, recuperación y mejora de las condiciones laborales de toda la planta de agentes municipales. Eso empieza con temas de seguridad e higiene, viendo las carencias en cada área, y lo que espero es que toda la gente que reciba una remuneración del Municipio le entregue algo al sector público. Tambiín que las condiciones de trabajo sean cada vez mas dignas. Pretendo terminar este año con un convenio que reglamente muchas cosas que hoy están en grises y en ámbitos informales. Eso debería llevar a un final para el actual sistema de becas, reconfigurando un ordenamiento adecuado con empleados resguardados, bien remunerados y dispuestos a dar lo mejor para los vecinos.
– Denunció una deuda de más de 300 millones de pesos al asumir en Pilar ¿En que se gastó ese dinero? ¿Van a avanzar en investigar a la anterior administración?
Vamos a avanzar sin duda. Para eso hace falta un proceso de inventario para ver donde está lo que falta. Ese proceso no es sencillo, por lo cual área por área estamos identificando a los responsables del patrimonio y constatando si existe o no este patrimonio, y chequeando si no está en otra dependencia. Este era un Estado municipal sumamente flexible y había cosas que no están en un lugar y están en otro. Entonces antes de sumariar a algún funcionario, tuvimos que hacer un trabajo exhaustivo.
Luego activamos la Dirección de Sumarios que prácticamente no funcionaba en los últimos años. Triplicamos el personal afectado a esa área para hacer toda la investigación y llevar hasta las últimas consecuencias administrativas los procesos en los que no se haya cumplido con la conservación de los bienes del Municipio.
Por último, a travís de la participación ciudadana recoger aquellas áreas donde la prestación del servicio municipal haya sido ineficiente, irregular o con corrupción. Con ayuda de los vecinos podemos tomar esa información y hacer algo al respecto. Hemos tenido un Municipio ciego y sordo ante los problemas de la mala administración pública. Queremos abrir los ojos y los oídos para escuchar al vecino cuando tenga una inquietud. Cuando me dicen que un funcionario estuvo involucrado en algún hecho de corrupción intervengo directamente, porque son prácticas que se tienen que terminar. Si hubo comportamientos indebidos avanzaremos en las sanciones.
Al patrimonializar, sumariar y fomentar el control cívico vamos a abordar parte del problema. Eso no resuelve la deuda recibida, que se utilizó en no pagar los gastos corrientes del Estado en algunos casos desde mayo y en otros desde septiembre u octubre.
Es difícil saber en que se gastó la plata. Para eso debemos analizar la rendición de cuentas, que entrará esta misma semana al Concejo Deliberante y estoy seguro que durante este mes y medio generará debate, controversia y ojalá un análisis muy concienzudo sobre como se administró el patrimonio. Soy muy critico de la administración del patrimonio de Pilar. Pero serán el HCD y el Tribunal de Cuentas quienes evaluarán si se cumplió con lo que se debía cumplir durante 2015.
Fuente: www.zonanortediario.com.ar