Fue en un 10 de mayo de 1508 cuando Miguel Ángel, uno de los artistas más importantes de la historia, decidió emprender una de las obras de arte más ambiciosas de su vida, los frescos de la capilla Sixtina, tarea que le fue asignada por el Papa Julio II.
Los resultados de cuatro años de arduo esfuerzo, se ven reflejados en las maravillosas imágenes renacentistas que hoy se encuentran vigentes y abiertas al público. Miles de personas viajan al Vaticano cada año para poder disfrutar del espectáculo visual que nos provee el artista, convirtiéndose en la atracción principal de esta pequeña ciudad.
La decisión del papa Julio II de decorar la capilla, como el Vaticano lo indica, se debió a la larga grieta del techo que se originó a causa de las excavaciones para la construcción de la torre Borgia y del nuevo San Pedro.
Detrás de estas importantes obras de arte existen detalles y datos durante el proceso de su elaboración que quizás pasamos por alto, por eso, hemos recolectado siete de las más destacadas curiosidades de la capilla Sixtina, para que conozcas de ellos y notes de esos detalles en tu próxima visita.
1. El andamio de Miguel Ángel.
Miguel Ángel construyó un andamio para pintar la bóveda, consistía en una plataforma de tablas sujetas a partir de unos soportes en agujeros de las paredes, actualmente en ella se celebran misas anuales en honor al bautizo del señor.
2. Miguel Ángel se representa en una de sus pinturas.
A los pies de cristo, a la derecha este San Bartolomé, en una mano sujeta el instrumento con el cual fue despellejado vivo, y en su otra mano cuelga su piel; se dice que la piel es un autorretrato de Miguel Ángel queriendo demostrar con esto cuanto odia pintar.
3. Las quejas del maestro de ceremonias del Papa.
El maestro de ceremonias Biagio de Casena, dijo que era de mal gusto que en un lugar de santidad hubiese retratos desnudos, aseguro que estos eran propios de baños públicos o de tabernas, en respuesta de esto, Miguel Ángel lo represento como Minos, el juez del infierno. Muchos dicen que cuando este fue donde el papa a quejarse, este respondió que su jurisdicción no incluía el infierno, por lo que el retrato debía mantenerse.
4. Censuran las pinturas.
El papa Pio V encomendó en 1564 al artista Daniele da Volterra cubrir los genitales de la pintura del juicio final, lo que le costó que le apodaran “el pintacalzones”.
5. Cómo se elige al nuevo pontífice.
La capilla Sixtina es la sede del conclave desde el 1870, allí se realiza la reunión en donde los electores del colegio cardenalicio eligen al nuevo papa. Luego de ser elegido, se le conduce a la sala de lágrimas de la capilla Sixtina, la sala recibe este nombre porque los nuevos pontífices usualmente rompen en llanto por la emoción del nombramiento.
Después se coloca una chimenea en el tejado, y el humo sirve de señal para las personas de la ciudad y les avisa si ya se eligió el nuevo pontífice. Se queman las papeletas del nombramiento en una estufa y el humo sale blanco, esto significa que un nuevo papa ha sido elegido. De lo contrario, se queman las papeletas junto con la paja húmeda y el humo sale negro, significa que nadie fue elegido.
6. Miguel Ángel odiaba pintar.
El pintor Miguel Ángel no disfrutó pintar la capilla, de hecho en uno de sus poemas describe el trabajo como tortuoso, tanto físico como mentalmente, incluso escribió que debería cambiarse de oficio y no ser más un pintor.
7. La capilla fue pintada dos veces.
Antes de Miguel Ángel, otros pintores ya habían trabajado antes en la decoración, Sixto IV encargo a un equipo de pintores renacentistas conformado por Pietro Perugino, Sandro Botticelli, Domenico Ghirlandaio y Cosimo Rosselli, ellos elaboraron pinturas en las paredes norte y sur, sin embargo, debido a las grietas que surgieron en el techo, se vieron en la necesidad de repintar la capilla.
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