Platense cayó 1-0 en su visita a Tristán Suárez; el local pegó primero y luego se defendió bien.Por el partido correspondiente a la novena jornada del Campeonato 2015 de la Primera B Metropolitana, el plantel profesional de Platense tuvo que trasladarse durante la tarde del sábado hasta el estadio “20 de Octubre” de Ezeiza para medirse con Tristán Suárez, bajo el arbitraje de Paulo Vigliano, en busca de un triunfo que le permitiera sumar de a tres por primera vez en condición de visitante.
El Marrón llegaba afilado y en crecimiento luego de haber obtenido de manera consecutiva los dos primeros triunfos de la temporada, ante Villa San Carlos y Deportivo Armenio, ambos como local en Vicente López. Mientras que el dueño de casa venía de derrotar al “Celeste” en Berisso, tambiín cortando una racha negativa que había puesto en jaque la continuidad de Pedro Monzón como entrenador.
Por momentos el partido hizo recordar mucho a la etapa del “Moncho” como director tícnico de Platense. Es que a Tristán Suárez le alcanzó con muy poco para ser protagonista durante el primer tiempo, convirtió y luego en el complemento retrocedió varios metros para aguantar el resultado con capa y espada. Bastante similar a los planteos que realizaba Monzón durante su ciclo en el Calamar y que tantos resultados le dio.
La etapa inicial pintaba para el 0-0, pero con un Platense que prácticamente no pasaba la mitad del campo de juego, y un “Lechero” que cada tanto intentaba incomodar. Hasta que en el penúltimo minuto reglamentario, llegó la apertura del marcador. Hugo Zarco recibió un muy buen centro en el corazón del área y entre medio de los dos centrales cabeceó para sentenciar el 1-0 con el que los equipos se fueron al descanso.
En el complemento Pedro Bocca comprendió que había que ir con todo en busca del empate y así se vio reflejado en el equipo, logrando atorar durante casi 45 minutos a su rival. El ingreso de Agustín Palavecino por Emiliano Gianunzio le dio un poco más de fútbol al Marrón, pero no fue suficiente para lograr la igualdad.
Poco a poco Daniel Vega fue convirtiíndose en uno de los hombres más importantes del campo de juego, puesto que tuvo al menos cuatro situaciones claras para emparejar el resultado. En la primera eludió hasta al arquero para luego definir con ángulo cerrado y la pelota se fue cerca del palo.
Y luego comenzaron las polímicas, porque a “Trapito” le anularon dos goles por posición adelantada. Viendo la repetición queda claro que el segundo gol estuvo bien anulado, pero en el primero la jugada es demasiado fina y quedan sembradas las dudas. Lo cierto es que ninguno de los dos fue convalidado y los tres puntos quedaron en Ezeiza, aún cuando el Marrón tuvo un par de oportunidades más para igualarlo: un tiro de media distancia de Pablo Miranda que se fue por encima del travesaño (tras un gran pase de Palavecino) y un cabezazo de Sebastián Lamacchia que se fue apenas desviado.
Durante los últimos instantes el Calamar atacó hasta con Ezequiel Mastrolía, quien dejó el arco para ir a buscar de cabeza algún centro al área, aún cuando faltaban algunos segundos para que terminara el partido. Quedó la sensación de que si Platense afrontaba los 90 minutos como lo hizo en los últimos 45′, la historia podría haber sido otra.
Fuente: www.zonanortediario.com.ar